Abarcar un mundo y morir en las tempestades
entre basura y sueños en decadencia
a dónde quedó aquello que soñaste que serías
la familia está primero -el cansancio- la fatiga
el desgano, la inoperancia
El desatino del miedo
esa palabra poco simple que acorrala
que engaña la mentes
el cuerpo más débil
el tiempo como rutina de uno mismo
de aquel soñador abstracto en zapatillas viejas
el punto entre la costumbre y la desesperación
El silencio -o su similitud de ciudad- anuncia
que tu lado oscuro te ha declarado la guerra
Sucia, como todas las guerras
se fortalece al verte de rodillas
entre el llanto de marfil, la poción del dinero
Deseos esparcidos entre harina y desarraigos
entre charcos y huracanes
en la piel vieja u otra ventana cerrada
Juventud -idiota, vil, vehemente, inútil- como un enero
lejano y radiante
preso de recuerdos difusos
palabras de engaño
personas inolvidables
Como eso,
una última pausa
un respiro
que tal vez fue o tal vez no
A ti dejo mis cosas
Hace 8 años
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